Desde el principio, el propósito cultural y artístico de la Konzerthaus de Viena, estaban bien definidos: "ser un lugar para el cultivo de la buena música, un encuentro de tendencias artísticas, un hogar para la Música y para Viena." Con este espíritu se inauguró el Konzerthaus el 19 de octubre de 1913, con un concierto solemne en presencia del emperador Francisco José I.
Richard Strauss creó para esta especial ocasión su "Preludio festivo op. 61 ", después de lo cual escucharon la Novena Sinfonía de Ludwig van Beethoven. Este tipo de programa - una obra contemporánea y una obra maestra del pasado - sirvió como modelo para la Konzerthaus de Viena; es decir, la conciencia de la tradición y la alegría de innovar representan hasta el día de hoy los dos pilares del mundo de la música en la Konzerthaus, y son parte constitutiva de su identidad artística.
El ambiente único de la Konzerthaus de Viena atrae a artistas no sólo de la vida internacional de la música, sino que es también el escenario para numerosos actos sociales, bailes, conferencias, cenas, presentaciones y celebraciones de empresas. El servicio en el caso de negocios tiene una larga tradición que se remonta a los años 20’s en la Konzerthaus de Viena; sin embargo; debido a la amplia gama de programas y servicios que ofrece, la convierten en un Salón bastante prometedor para el futuro. A cause de la remodelación a gran escala a la que fue sometida, (1998-2001), el edificio de larga tradición se encuentra ahora equipado para responder a los desafíos del tercer milenio.